Rosario ya registra 63 casos positivos de coronavirus. En este contexto, Leonardo Caruana, el secretario municipal de salud pública, explicó cómo se prepara la ciudad para el pico de la enfermad. Además, despejó las dudas sobre la «polémica» de los barbijos y remarco la importancia de la conexión con todos los sectores de salud en diálogo con Prensa18.
-¿Cómo se está manejando la situación en los hospitales de Rosario tanto municipales como provinciales? ¿Cómo es la comunicación con él Sanatorio Parque?
-Estamos trabajando desde los inicios de los casos en china. En la organización de todos los servicios de salud, no solo el municipio con la provincia, sino también con el sector privado, y a partir de la cantidad de casos confirmados en la Argentina, profundizando todo lo que es el entrenamiento del protocolo, de la provisión de insumos de trabajo, de ejercicio, de definición, de qué hospital va a tener potencialidad, de que perfiles van a atender hospitales y centros de salud. Pero aquí hay algo importante y es la valoración a cada centro de salud de barrio. En las guardias, la población con patologías respiratorias ingresa por un lugar para que no se mezclen con personas con otra problemática de salud. Generar estrategias de trabajo también, generando el distanciamiento social dentro del sector sanitario , es decir, nosotros hoy tenemos franjas horarias para atender a las embarazadas, para atender a niños y no se combinan con la atención al paciente respiratorio. Tenemos una estrategia para que todos los mayores se atienden en el centro de salud y los vacunamos en él domicilio. Esto nos permite un tiempo para organizar todo el sistema de salud.
-Hace pocos días, se confirmó casos de COVID-19 en un sanatorio rosarino. “Tres profesionales del Sanatorio Parque dieron positivo en el test de coronavirus. Se trata de dos médicos y de un instrumentista, quienes habrían tenido contacto con un residente de traumatología que estuvo en Brasil y no cumplió con la cuarentena porque regresó antes de que ese país fuera incluido en la lista de riesgo”
-Con el Sanatorio Parque como con el Hospital Centenario, como con el Municipal, donde se han dado situaciones de trabajadores que han tenido alguna relación con él contagio y ha provocado otro contagio, es decir, circulación en pequeñas zonas, como ha pasado también con colectivo que vino de Ushuaia y a partir de ese contagio hubo varias personas contagiadas, desde nuestro soporte epidemiológico fundamentalmente del área provincial también el municipal trabaja en él distanciamiento, en la búsqueda de los contactos y enseguida organizando los servicios de salud. Para nosotros es fundamental la máxima articulación con el sector privado teniendo en cuenta que tiene entre un 60% y 70% de las camas críticas de la ciudad, entonces en escenario trabajamos. Lamentablemente vamos a tener situaciones de trabajadores con este problema, primero que han venido trabajadores de la salud con antecedentes de viaje y por otro lado por él propio riesgo del trabajador de contagiarse que también es otro escenario posible y hay que tratar de cuidarlos al máximo teniendo mascarillas,las batas,las gafas, los barbijos, todo lo que se necesite para disminuir el nivel de la posibilidad de contagio.
-Teniendo en cuenta que hablas de estrategias, ¿está preparando estrategias especiales en la ciudad para afrontar el pico de la enfermedad?
-Nosotros estudiamos todas las posibles ampliaciones, de hecho la terapia intensiva por ejemplo podría extenderse a un 50%, un 75% o hasta un 100% la cantidad de camas. Eso va a depender de la cantidad de respiradores que tengamos para poder resolver el aumento de camas. Por otro lado trabajamos también en la ampliación de camas generales y ya estamos (aunque no este en funcionamiento) terminado toda la logística de un área de aislamiento para una potencialidad de mil personas para que estén aisladas cuando ese aislamiento no lo pueden hacer en su casa. Poder hacerlo en otro lugar como él hipódromo y la rural. Somos críticos para tener un funcionamiento de todas las guardias y todos los centro de salud de un aumento potencial del contagio
-En cuanto a la polémica de los barbijos, pueden prevenir el virus en personas que deben circular sí o sí por la vía pública? ¿Los barbijos solidarios hechos con friselina, son seguros?
-Coincido en que es un tema que genera polémica, que tiene que ver más con los temores, la prevención, lo que vemos de otros países que utilizan barbijos antes de la pandemia. Nosotros seguimos el protocolo de la OMS, es decir, este es un virus de superficie, es un virus mucho más pesado que a diferencia del sarampión o de otras virosis, se encuentran en él ambiente. Nosotros damos siempre este ejemplo, sí sería como el sarampión, en una habitación con varias personas, estarían todos contagiados por qué el virus se mantiene en el aire. Él coronavirus no es así, cae en los lugares. Entonces la higiene y el lavado de manos es lo más importante, mucho más importante que él barbijo.
Los barbijos de friselina no duran más de 3 horas y lo que pasa es que habitualmente ese barbijo se humedece, se desacomoda y lo que hacemos es acomodarlo, tocarnos y eso relaja las medidas más importantes porque uno cree que está protegido. Entonces, los que deben utilizar son trabajadores de la salud que estén en contacto con patologías respiratoria, la persona que tiene él caso sospechoso confirmado y algunas situaciones puntuales y particulares. Nosotros hoy estamos trabajando con las mascarillas especiales. Pero en este momento no está indicado contra otra situación. Puede ver en otra situación, lo decíamos, la embarazada, la mamá que está amamantando, en ese sentido puede ser él higiene, él lavado y el uso del barbijo, pero tiene indicaciones muy puntuales. No es que los trabajadores del delivery, él taxista,los trabajadores de la calle tengan que usar. Primero que no tiene la logística como para poder cambiarlo cada tres horas, por otro lado relajan la parte más importante que es limpiar el celular, limpiar las superficies , las cosas que tocamos y lavarnos las manos con agua y jabón. Estos son los protocolos internacionales. No es una disposición local de la ciudad y lo hacemos con el asesoramiento de infectólogos y epidemiólogos. También para los trabajadores de prensa, la limpieza de los micrófonos, del celular, hacer esta comunicación, por teleconferencia y estar a distancia de dos metros es lo que más nos cuida en vez de tener barbijos y estar todos juntos por que eso provoca que nos contagiemos más.
-En cuanto a las vacunas antigripales para adultos mayores, ¿como es la organización en cuanto a la distribución? ¿Funciona como método de prevención ante el coronavirus?
-La vacuna antigripal para nosotros es un hecho sanitario para hipotecar los grupos de riesgos. Hoy estamos haciendo varias estrategias. Previene las complicaciones de la gripe, y hay un factor de riesgo, un subgrupo, que se llama adultos mayores que está muy afectado por él coronavirus.
Empezamos por los trabajadores de la salud, y ahora estamos vacunando a los adultos mayores. En los centro de salud, vamos a vacunar a las personas que tenemos familiarizadas y eventualmente se atienden allí. Y por otro lado, a la población del distrito centro que no tenga PAMI y no tenga obra social, le damos un turno telefónico para evitar que se llene de gente, para evitar lo que paso ayer en los bancos, porque eso es no cuidado de las personas mayores, que son factores de riesgos. Nosotros de 54 casos confirmados, 14 fueron a internación y el 90% fueron mayores de edad y con complicaciónes. La vacuna ataca el virus de la gripe, para él coronavirus no tenemos alternativa no tenemos vacuna. El tratamiento es cuidarnos, él distanciamiento, limpiar los ambientes, lavarse las manos con agua y jabón y si tenemos síntomas consultar, porque para los mayores de 60 años la evolución en pocas horas puede ser desfavorable. Pero si tienen todos las vacunas, evitan enfermarse de la gripe que también es una situación frecuente en esa población.