Se terminó la etapa de Mauricio Macri en Argentina. Alberto Fernández asumió como nuevo presidente de la Nación, luego de jurar en el Congreso junto a Cristina Fernández de Kirchner, la vicepresidenta. A continuación, dio su primer discurso, donde anunció una serie de medidas económicas para afrontar la crisis.
El nuevo presidente comenzó su discurso con un mensaje de unidad. «Vengo a convocar a la unidad de todo el país, sin distinciones, para poner a la Argentina de pie. Hay que recuperar un conjunto de equilibrios sociales económicos y productivos que hoy no tenemos», expresó.
A continuación, Fernández confirmó que no le darán tratamiento al presupuesto propuesto por el gobierno saliente. Además, agregó: «Para poner a la Argentina de pie, el proyecto debe ser propio y creado por nosotros. No dictado por alguien de afuera. No hay pago de deudas que se pueda sostener si el país no crece», haciendo referencia al endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional.
«Los acuerdos básicos de solidaridad serán el punto de partida. Hay que salir de la lógica de ajuste, recesión y deuda. En este presente que afrontamos los únicos privilegiados serán quienes han quedado atrapados en el pozo de la pobreza y la marginación», afirmó el nuevo presidente.
Por otra parte, Fernández confirmó la restitución del Ministerio de Salud, que había sido reducido a secretaría durante el mandato de Mauricio Macri. «Vamos a declarar la emergencia sanitaria, los argentinos van a volver a tener derecho a una atención de salud de calidad», dijo.
En otra de sus medidas, Fernández anunció la intervención de la AFI. «He decidido que sea intervenida la Agencia Federal de Inteligencia. Para impulsar una reestructuración. Como paso inmediato derogaré el decreto de fondos reservados de 2016 y esos fondos serán para financiar el plan del hambre», comentó.
«Argentina no debe aislarse y debe integrarse a la globalización pero debe hacerlo de forma inteligente”, declaró, y también habló sobre la situación del continente americano. “Seguimos apostando por una América Latina unida. Nadie puede realizarse en un país que no se realiza, decía Perón. Tampoco lo haremos en un continente que no se realiza», añadió.
Además, el ex jefe de gabinete habló sobre las Islas Malvinas: «Trabajaremos incansablemente para recuperar las islas. Lo haremos sabiendo que el único camino posible es el de la paz. No hay más lugar para colonialismo en el siglo XXI».
En la continuación de su discurso, Fernández admitió un «deterioro judicial en los últimos años». «He decidido que sea intervenida la agencia federal de inteligencia. Queremos impulsar una reestructuración», anunció y agregó: «Nunca más a una justicia contaminada por los servicios de inteligencia. Nunca mas a una justicia que persigue a los vientos del poder de turno».
También hizo énfasis en «escapar a la lógica del gatillo fácil», el presidente dejó en claro que debe ser «una política de la sociedad, integral y cogestionada”.
En uno de los momentos más destacados de su presentación, Fernández afirmó que hará «todos los esfuerzos necesarios para que estén en primer plano los derechos de las mujeres». «Ni una menos debe ser una bandera de toda la sociedad y de todos los poderes de la República. Es necesario reducir la violencia contra las mujeres hasta su total erradicación», agregó.
Por último, Fernández expresó: «¿Seremos capaces como Argentina unida de construir esta serena utopía? Quiero ser el presidente que escucha. Y si no cumplo salgan a la calle a recordarmelo. Todos debemos despojarnos del rencor. Basta de perseguir al que piensa de otro modo”.